La regla de los tercios tal vez sea la más conocida de las reglas de composición fotográfica. Algunos fotógrafos la usan instintivamente, a otros no se les facilita tanto y otros simplemente la rompen sin saber siquiera que existe.
Muchos dirán que las reglas (particularmente las de fotografía) se hicieron para romperse, tal vez, pero debemos reconocer que esta regla es bastante útil y puede convertir una fotografía “normal” en algo considerablemente más llamativo.
La regla de los tercios
La regla de los tercios es muy simple: para usarla divide la imagen captada por la cámara en tres partes iguales horizontalmente y en tres partes iguales verticalmente y ya quedó. Al hacer esto se forma una cuadrícula y la imagen queda dividida en 9 secciones por 4 líneas, dos verticales y dos horizontales. Las 9 secciones, las 4 líneas y las intersecciones entre estas líneas son ahora las referencias que servirán para colocar los elementos de interés de nuestras fotografías. La regla de los tercios sirve muy bien para producir imágenes balanceadas y agradables a la vista.
Tercios inspiradores y elementos de interés
¿Cuáles son los elementos de interés de una fotografía? Bueno, esto depende de la fotografía. La línea del horizonte o los volúmenes de los elementos arquitectónicos pueden serlo.
El puente y su estructura de soporte que aparecen en la primera fotografía están colocados en una de las líneas verticales y en una de las líneas horizontales de la cuadrícula. El volumen principal de l`Hemisferic y del Palacio de Louvre también se encuentran alineados con la cuadrícula.
Las fotografías de cuerpo entero con un paisaje de fondo se vuelven más interesantes al usar la regla de los tercios. En la fotografía de arriba tanto el tren como la modelo resaltan fácilmente por estar en las líneas verticales de la cuadrícula.
Una perspectiva diferente + la regla de los tercios = una foto interesante.
No hay forma de que este hombre que pasa un rato agradable remando no sea el punto de atención de la fotografía. Por un lado su chaqueta color naranja contrasta con la monotocromía del resto de la composición, por otro lado se encuentra justo en laintersección de dos líneas de la cuadrícula.
La regla de los tercios en su máxima expresión.
Ya hablé una vez más de la regla de los tercios, ya viste el poder de esta regla en acción en estas inspiradoras fotografías. Ahora eres libre de seguirla o romperla, pero con conocimiento de causa. ¿La rompes o no? ¡Comenta!